Una advertencia alarmante que he observado en diferentes foros de psicología es que algunas personas están usando ChatGPT (o cualquier otro modelo de inteligencia artificial) como si fuera un psicologo al que le piden consejo para salir de su depresión o para dejar al novio.
Es innegable que en los últimos meses, el avance de las “Inteligencias Artificiales”, a la relacion terapeutica que se establece entre psicologo y paciente. En este artículo te explico por qué.
que crean imágenes, generan música o imitan el lenguaje humano ha supuesto toda una revolución. Sin embargo
aunque el uso masivo de la IA conlleva excelentes avances en algunos campos, no puede sustituir al factor humano y, por lo tanto,
5 motivos por los que Chat GPT no es un psicólogo
Considero imprescindible explicar las diferencias entre preguntar a una inteligencia artificial y hacer terapia con un psicólogo.
Antes de escribir este artículo le pregunté a ChatGPT si él, ella (o ello), podría ejercer como psicólogo y esta fue su respuesta: “Como modelo de lenguaje, no tengo la capacidad de ejercer como psicólogo de manera independiente, ya que soy una entidad virtual y no tengo las habilidades necesarias para llevar a cabo diagnósticos ni tratamientos terapéuticos. Además, es importante señalar que ejercer como psicólogo requiere una formación académica y una licencia profesional, lo cual no es posible para una entidad virtual como yo”.
ChatGPT tiene claro que no es un psicólogo, ahora te voy a dar las razones por las que efectivamente (en esto) tiene razón.
1. ChatGPT es un algoritmo
La rapidez en sus respuestas y la similitud con el lenguaje natural ha provocado que muchas personas interpretan que realmente están teniendo una conversación con el Chatbot, de la misma manera que chatean con sus familiares en el grupo de Whatsapp.
Nada más lejos de la realidad. ChatGPT no es una persona, ni siquiera es una mente computacional que entiende tus problemas. Se trata de un complejo algoritmo que ha sido perturbado con millones de textos y que ha aprendido qué secuencias de palabras deberían ofrecerse en cada caso. Por ejemplo, el programa calcula que si le escribimos “Voy a escalar una…” es más probable que encaje la palabra “montaña” que la palabra “pañuelo” . Es un simple cálculo de probabilidad, no es una conversación.